Una pesca increible

UNA PESCA INCREIBLE

HOLA AMIGUITOS, Dios les bendiga.

Bienvenidos al Devocional Creciendo con Jesús, qué hermoso es poder compartir con ustedes las enseñanzas e historias del libro más importante que existe LA BIBLIA.

Aunque Jesús el Hijo de Dios es poderoso, en muchas ocasiones nos da el privilegio de ser sus ayudantes para hacer algo importante. La historia de hoy confirma este hecho.

Jesús pidió la ayuda de sus amigos para lograr una gran pesca. Esto no quiere decir que Él no podía hacerlo solo, no. Él sí puede hacer grandes pescas, pero siempre busca involucrarnos en sus planes, porque nos ama y nos toma en cuenta. Hoy aprenderán que por la confianza que tenemos en el Hijo de Dios, podemos obedecer en lo que nos pida hacer.

La historia de hoy la encontramos en LUCAS 5, 1-11

Un día, Jesús estaba a orillas del lago Genesaret y la gente lo apretujaba para escuchar el mensaje de Dios, entonces vio dos barcas que los pescadores habían dejado en la orilla mientras lavaban sus redes, subió a una de las barcas que pertenecía a uno de sus discípulos llamado Simón y le pidió que la alejara un poco de la orilla, luego se sentó y enseñaba a la gente desde la barca. Cuando acabó sus enseñanzas, le dijo a Simón, que llevara la barca a la parte honda del lago y que allí echaran las redes para pescar. Simón le dijo a Jesús: Maestro hemos estado trabajando duro toda la noche y no hemos pescado nada, Pero si tú me lo ordenas yo echaré las redes. Ellos estaban tristes porque tenían hambre y no tenían que comer. Pero escucharon la voz de Jesús diciéndoles que deberían pescar. 

¿Qué creen que sucedió? ¿Creen que los discípulos pescaron esa noche? ¡Por supuesto! Ellos obedecieron lo que Jesús dijo y recogieron tanto y tanto pescado que las redes se rompían. Las redes pesaban tanto que la barca estuvo a punto de hundirse. Los amigos de Jesús hicieron lo que Él les dijo y encontraron muchos peces en la red. La pesca había llenado de asombro y de temor a Simón Pedro y los que trabajaban con él, Jesús dijo a Simón: «No temas; desde ahora serás pescador de hombres.» Así que llevaron las barcas a tierra, y dejándolo todo, siguieron a Jesús.

Jesús nos invita a través de su palabra a ser pescadores de hombre, y como podemos ser pescadores de hombres? contando a todas las buenas noticias acerca de Jesús

Es curioso que Jesús eligiera a pescadores para ser sus discípulos. Eso significa lo que cada discípulo auténtico tiene que ser, un pescador de almas de hombres. Los pescadores somos nosotros, los hijos de Dios, el mar   representa el mundo, los peces son las personas que aún no conocen a Jesús, la carnada simboliza la Palabra de Dios, y es Jehová de los ejércitos   quien proporciona el crecimiento.

Los discípulos, comprendieron, y dejaron sus redes y le siguieron. Jesús no era un simple desconocido, ya que era casi imposible no recibir la señal que impartía tan solo con una mirada: porque era el hijo de Dios, su espíritu estaba conectado a un reino celestial.

Para nosotros poder seguir más de cerca a nuestro señor Jesús debemos tomar la decisión de dejar muchas cosas atrás, la desobediencia, la grosería, la mentira, todas estas cosas nos causan daño y nos separan de él. Incluso pudieran ser cosas que nos den alegría pero que a pesar de eso, es necesario dejarlas si realmente queremos  caminar con Jesús.

VERSÍCULO CLAVE:

Niños hoy el llamado es a seguir a Jesús y llevar su mensaje a todas las personas que podamos, así llegaremos a ser PESCADORES DE HOMBRES.

 Oro para que todos podamos dejar todas esas costumbres y hábitos que son pecado y que nos alejan de Dios, y nos llevan al sufrimiento y cada día nos acerquemos más a Jesucristo y poder seguir Creciendo con Jesús. Y ahora alabemos al Señor. 

DIOS LES BENDIGA